Un nuevo actor electoral Opinión Basado en interpretaciones y juicios del autor sobre hechos, datos y eventos

¿Viejas fracturas, nuevos alineamientos?

España Vaciada tiene ante sí el reto de certificar la vigencia política de la vieja fractura entre lo urbano y lo rural

Manifestación de la España vaciada en Madrid, el 31 de marzo de 2019, que contó con la participación de 90 colectivos de 23 provincias, entre ellas Soria. / EFE / CHEMA MOYA

Una de las argumentaciones más exitosas para explicar la existencia de distintos sistemas de partidos en el mundo occidental es la teoría de las cuatro fracturas, ‘cleavages’ en la jerga politológica, formulada por Seymour Martin Lipset y Stein Rokkan en su clásico ‘Party Systems and Voter Alignements’ publicado en 1967. De manera simplificada, esta teoría sostiene que el mundo occidental ha asistido a dos grandes revoluciones, la revolución nacional que alumbró al Estado-nación y la revolución industrial. Fruto de esas dos revoluciones emergieron cuatro grandes líneas de fracturas de naturaleza sociológica que han dividido todas las sociedades. Las fracturas religiosa y centro/periferia fueron el resultado de la primera de las revoluciones, mientras que las fracturas capital/trabajo y urbano/rural fueron fruto de la segunda.