Ágora Opinión Basado en interpretaciones y juicios del autor sobre hechos, datos y eventos

Sinhogarismo, presupuestos y aporofobia

A pesar de que el número de personas sin techo se ha duplicado en la última década, Catalunya ha hecho muy poco para abordar esta problemática. No existe un censo ni un mapa de recursos

Concentración por la muerte de cuatro personas en un local ocupado en plaza de Tetuan, el 30 de noviembre de 2021. / JOAN MATEU PARRA

Cuatro personas mueren en un incendio en un local ocupado de la plaza Tetuan de Barcelona, informaba EL PERIÓDICO el pasado martes. Dos eran menores. Un niño de tres años y su hermana de cuatro meses. Vivían privados de los derechos más básicos, como otros 209 niños y niñas y 656 personas adultas que malviven en naves o infraviviendas de la capital catalana. La muerte es el rostro más duro del sinhogarismo, un proceso de vulneración de derechos que se inicia cuando se priva a una persona de la vivienda y que continúa con otros derechos como el acceso a la salud, al trabajo, a la integridad física o a vivir en sociedad.