Ágora Opinión Basado en interpretaciones y juicios del autor sobre hechos, datos y eventos

La siguiente transformación urbana

No podemos dejar que los negacionistas de las terrazas de los bares condicionen el progreso de Barcelona

Uno de los prototipos de nuevas terrazas de Barcelona que sustituyen los bloques de hormigón, en Portal Nou, 23, creada por Urbadis Microarquitectura. / JORDI OTIX

Todo está a punto para que, en cuestión de semanas, Barcelona inicie una nueva transformación urbana. Las terrazas que durante la pandemia se han instalado en la calzada experimentarán un proceso de dignificación después de que el consistorio haya homologado en tiempo récord cuatro modelos de plataforma cuya instalación (previa retirada de los famosos New Jersey amarillos) será obligatoria. Las mesas y sillas se quedan, sí, pero pasarán del asfalto a estas plataformas y ganarán en comodidad y en estética. Los restauradores están impacientes por iniciar el proceso, aunque para ellos supondrá una inversión y no en el mejor momento. La ciudadanía, que ha conquistado sin complejos y sin manías estos veladores de emergencia, aplaude una mejora que será visible en los 10 distritos. Entre medias, el pleno de diciembre ratificará la modificación puntual de la ordenanza de terrazas cuyo objetivo principal es, precisamente, dar cobertura legal a los nuevos veladores.