La semana pasada la Confederación de Asociaciones de Vecinos de Catalunya celebró su cuarta jornada de '(Re)coneixements Veïnals'. Este año, 18 iniciativas optaban a ser reconocidas como las mejores propuestas de trabajo comunitario y vecinal. Cuatro proyectos ganadores. En la categoría de mejor lucha 'Salvem Can Raventós', de Sarrià y accésit a 'Volem la biblio', del barrio de Santa Eulália de L’Hospitalet. En la categoría de proyecto comunitario, la Taula de Salut Comunitària de Sabadell Sud, y accésit a 'Fes-te-R', de Arenys de Mar. Hay que contarlo porque casi nadie lo ha hecho. Y porque formar parte hoy de una asociación de vecinos es una de las militancias más complicadas, desgastantes e invisibles, y merece, ciertamente, reconocimiento.