Educación sénior Opinión Basado en interpretaciones y juicios del autor sobre hechos, datos y eventos

Lomos plateados

El acceso a la formación en edades avanzadas ayuda a tener un envejecimiento positivo y activo, contribuye a mantener la salud mental y alarga la esperanza de vida

Una mujer juega con una aplicación online. / Pixabay

Dentro de una década, una de cada dos personas que nos crucemos por la calle tendrá más de 50 años. La poca natalidad y la creciente longevidad en los países occidentales obligaran a generar nuevos servicios y políticas en torno a lo que se conoce con el nombre de ‘economía plateaday que se dirige a las personas con pelo blanco. A pesar de que nos repetimos aquello de que los 60 son los nuevos 50, los 70 los nuevos 60... y aunque los 110 se conviertan en los nuevos 100, la estadística es implacable y muestra que, a mayor edad, más probabilidad de enfermedades crónicas, pérdida de habilidades físicas o psíquicas o muerte de familiares y amistades, por lo que mantener la calidad de vida a medida que avanza la edad será uno de los retos principales de las sociedades occidentales. Por todo ello, es bueno conocer aquellas actividades que ayuden a tener un envejecimiento positivo y activo, ya sea para incorporarlas por iniciativa individual como para que las instituciones impulsen medidas públicas. Los componentes más conocidos de una vida saludable son el amor, el ejercicio y una buena alimentación, pero existe una variable más, quizás menos visible, con un impacto muy positivo: el acceso a la formación a lo largo de la vida.