Aniversario Opinión Basado en interpretaciones y juicios del autor sobre hechos, datos y eventos

50 años, de la unidad a la división

Resulta inaceptable que se haya querido establecer un paralelismo entre la Assemblea de Catalunya y la Assemblea Nacional Catalana

Primera manifestación tolerada de la ’Assemblea de Catalunya’ en Badalona. / MUSEU DE BADALONA / FONS JOSEP CORTINAS

Este domingo se cumplen 50 años de la constitución de la Assemblea de Catalunya, el primer organismo unitario de la oposición democrática en España que fue capaz de reunir tanto a los grupos políticos de ideología diversa que actuaban en clandestinidad, más allá del PSUC, como a entidades de la sociedad civil y a personas independientes. A la Assemblea le debemos la idea ampliamente aceptada en la Transición de que la lucha por las libertades democráticas era indisociable de la lucha por las libertades nacionales y no solo para Catalunya, sino también para los diversos pueblos de España. Su lema ‘Llibertat, Amnistia i Estatut d’Autonomia’ no solo hizo fortuna, sino que se acabó materializando hasta el punto de comportar la disolución de la propia organización a partir del momento en que se normalizó el ejercicio de la democracia y, por tanto, de la pugna partidista. La enseñanza de todo ello fue que en la lucha contra el autoritarismo exigía unidad, pero que la democracia se basaba en la aceptación de la legitimidad del pluralismo.