ANÁLISIS

Laporta, o perder sin consecuencias

Aragonés, Laporta y Florentino, en el palco del Camp Nou tras el gol de Alaba. / Jordi Cotrina

Perder tendrá consecuencias. Esta frase persigue a Laporta desde que se envalentonó allá por el mes de mayo. En aquel proyecto optimista, en que contaba con tener a Messi e incluso sondeaba a Neymar, no se admitía la derrota y menos aún las temporadas de transición. Luego, la realidad nos ha llevado a otro punto y aquella sentencia parece una broma de mal gusto cuando el repertorio de derrotas ya permite clasificaciones entre humillantes y dignas.