APUNTE Opinión Basado en interpretaciones y juicios del autor sobre hechos, datos y eventos

Los delitos deberán esperar

Reverter, junto al atril en el Auditori 1899. / Albert Gea / Reuters

Los fichajes más caros, los salarios más elevados, una deuda desbocada y descuidada… Ferran Reverter le puso la firma y el sello al conocido apocalipsis azulgrana legado por Bartomeu. Lo hizo sin mencionar ni una sola vez su nombre, que tiene su mérito. No nos desveló ninguna fechoría desconocida concreta. La impugnación a la gestión fue al por mayor, con el respaldo de una ‘due dilligence’ que el director general presentó con profesionalidad y solvencia. Era su primera aparición en público y su credibilidad no está erosionada aún (todo llegará, esto es el Barça), así que fue capaz de ofrecer el contrapunto de rigor imprescindible a la improvisación que hoy aparenta Joan Laporta.