Caminata por Catalunya

Un Tururull en la carretera

Si se toma la travesía con tanto coraje como la huelga de hambre que protagonizó en la cárcel, la marcha por la libertad la hará en taxi pagado por la caja de resistencia

Jordi Turull, en un acto para pedir la amnistía el pasado 10 de marzo. / Josep Garcia

Ignoro qué pecado cometimos los gerundenses en una vida anterior, para que los dioses no cejen de castigarnos. He dejado de llevar la cuenta de plagas que nos mandan desde que nos enviaron a Cotarelo, que por sí solo es más pesado que las siete de Egipto. Cuando parece que ya hemos purgado las culpas, nos mandan una nueva desgracia. Este lunes, una de las mitades de los gemelos Tururull -no sé cuál de ellas, no las distingo- anunció que quiere cruzar Catalunya a pie, empezando en Portbou (Girona), en una «Marcha por la libertad», no me pregunten la libertad de quién o de qué, eso no importa. En lugar de huir hacia Waterloo, emulando a sus valerosos líderes, tal mitad de los Tururull enfilará hacia el sur, provincia abajo. Si el fin de semana va usted a la playa y ve a alguien en la cuneta de la N-2 sentado en una silla, no cometa el error de detenerse pensando que es una de tantas señoritas que ofrecen sus servicios a pie de carretera, quizás sea nuestro Tururull en pleno descanso. Dele agua, láncele si quiere un mendrugo de pan desde el coche, pregúntele si TV-3 paga bien las colaboraciones, pero no le requiera unos servicios para los que no está cualificado a pesar de los meses de cárcel.