El nombre de Xavier Folch figura en todos los relatos sobre la lucha antifranquista y la transición, pero en ninguno se le atribuye el lugar destacado que le corresponde. Así es como ha querido pasar a la historia, con la misma discreción con la que vivió, como un hombre que estuvo en todas las complicidades sin querer nunca asumir liderazgos públicos, que aborrecía. Y, sin embargo, no hay historiador que desconozca su protagonismo desde la cocina del tardofranquismo y del parto democrático y autonómico en Catalunya. Estuvo en todas las conspiraciones, en todas las negociaciones por las libertades, desde la Mesa Redonda de los años sesenta, hasta la Assemblea de Catalunya, pasando por la Caputxinada, donde se constituyó el Sindicato Democrático de Estudiantes de la Universidad de Barcelona. Además de ser uno de los principales impulsores de la movilización de los intelectuales a favor de la lengua, la cultura y las libertades nacionales de Catalunya.
Obituario
Xavier Folch, en la cocina de la unidad y la democracia
Fue un hombre que estuvo en todas las complicidades sin querer nunca asumir liderazgos públicos, que aborrecía
Xavier Folch
Temas
Lo más visto
- Adiós a otra tienda centenaria de Barcelona: "Cerraremos cuando agotemos las existencias"
- Los vecinos del bloque Venus perderán el realojo gratuito en La Mina si no renuncian a pedir indemnizaciones
- Nuria Roca explica la ausencia de Gonzalo Miró en su programa: "Nos ha cambiado por una mochila"
- Detenido un soldado estadounidense cuando estaba como turista en Rusia
- El Ayuntamiento de Barcelona pone fin a la feria de payés de Sant Antoni a petición de los 'paradistas' del mercado