Cumbre entre adversarios

Biden y Putin en Ginebra

El presidente de EEUU tiene que hilar fino y no atosigar demasiado a Moscú para que no se eche en brazos de Pekín, que es lo que de verdad quita el sueño a los americanos

Reunión de Joe Biden y Vladimir Putin en Ginebra. / REUTERS / POOL / Denis Balibouse / VÍDEO: EFE

En política exterior hay muchos tipos de reuniones, algunas sirven para mejorar el ambiente mientras que otras sería mejor no celebrarlas porque lo empeoran. Entre las primeras están los recientes encuentros de Biden con los líderes europeos, que han servido para poner fin al mal rollo de la presidencia de Trump, y entre las segundas, las que empeoran la situación, cabe citar la visita de Josep Borrell a Moscú. Mejor no haber ido. Otras no sabemos para qué sirven, como la escala nocturna en Barajas de la vicepresidente venezolana Delcy Rodríguez para verse con el ministro Ábalos. Y, finalmente, hay algunas que provocan carcajadas como la “Cumbre del Pasillo”, de Pedro Sánchez con Joe Biden.