Idiomas e infiltrados

La Paluzie y el amigo de mi abuelo

La ANC trabaja en realidad en favor del castellano, gracias a convertir la lengua catalana en antipática, politizada y arisca, haciendo que renuncie a ella gente que la hablaría sin problema

Elisenda Paluzie, presidenta de la ANC. / ACN

Lo que empezó como el intento de montar una republiqueta, ha terminado reclamando 'llibertat, amnistia, Estatut d’Autonomia'. Para ir a parar a 40 años atrás, no hacían falta tantas alforjas, en lugar de «presidente, ponga las urnas» era suficiente con «presidente, denos pantalones de pata de elefante y chaquetas de pana». El viaje en el tiempo, eso sí, no sería completo sin volver a aquellas arcaicas campañas de defensa de la lengua, ya saben, 'El català, cosa de tots' y etcétera. Ahí destaca la ANC (Asociación Nacional del Rifle, delegación catalana) que, puesto que no sirve para nada y de alguna manera ha de justificar subvenciones, prebendas y minutos televisivos, dispara contra todo el que no hable la lengua más bonita del mundo mundial.