Dietario de la espera

La primavera de los abrazos

Sobre pícaros, quijotes, esencialismos, el paso del tiempo y otros virus implacables

Jacarandas en flor, en Barcelona.

Sábado, 8 de mayo. Encuentro con amigas. Salen a la conversación las cuitas padecidas con los hijos durante la adolescencia. El chaval de una se aficionó a las fiestas 'rave' —mucho antes del coronavirus, ojo—, mientras el de otra, por el contrario, aquejado de una especie de agorafobia, no salía de casa para nada ni había forma de arrancarlo del ordenador. No sé qué habría preferido, la verdad… Sin manual de instrucciones, la vida siempre tiende a sorprenderte, a pillarte con el paso cambiado.