Apunte

Jugando con la corona

Las jugadoras del Barça celebran la Copa ganada en Leganés. / FCB

Sin Reina, pero con Copa, las jugadoras del Barça celebraron el triplete sobre el mismo césped de Butarque. El objeto estrella de la celebración fue una corona de juguete. Sirvió para parodiar la entrega monárquica del trofeo. Una exultante Andrea Pereira desfilaba con la falsa diadema a través de un pasillo de compañeras que la reverenciaban mientras al final la esperaba Jennifer Hermoso para recoger el trofeo. La escena tenía mucha retranca. Ellas, que no sabemos si de pequeñas soñaban con ser princesas, sí lo hacían con ser futbolistas y ahora disfrutan con un éxito que nadie les va a amargar. 

Son las menos sorprendidas por las ausencias institucionales. Están acostumbradas. Agradecen lo que llega y lo que no, les afecta bien poco. Quizá por eso canalizan su decepción con más humor que la indignación externa. Prefieren los cambios reales a esos gestos de cara a la galería que a menudo no son consecuentes.

La Reina Letizia solo ha asistido a una final, hace dos temporadas. Si quieren mantener tradiciones más propias de otra época, háganlo bien. Pero puesto que parece que da más pereza que otra cosa, quizás haya llegado el momento que la Copa pierda el apellido monárquico y se limite a ser una competición deportiva. Y si me apuran, búsquenle un patrocinador que le dé nombre, porque más que gestos inocuos lo que hace falta es inversión.

Sin Rubiales

Hablando de ausencias, tampoco estuvo presente el presidente de la federación española de fútbol. Luis Rubiales sí que pudo desplazarse a Oporto la noche anterior, para presenciar una final inglesa. Su agenda personal, con una cita importante, no le permitió estar en Butarque. Una lástima. 

En el caso del presidente del Barça, podemos entender que una final europea pasara por delante de una copa, aunque supusiera un triplete. El más feliz del fin de semana, el solitario directivo azulgrana que sí estuvo en Madrid y pudo celebrar un triplete histórico. Recogen los frutos de una apuesta firme. Solo les toca no estropearlo.