Modelo económico

El Madrid del sálvese quien pueda

La Comunidad ha movido el tablero de las políticas públicas: desde la creencia ciega en la 'curva de Laffer' hasta una supuesta sacralización de las libertades individuales

Isabel Díaz Ayuso, presidenta en funciones de la Comunidad de Madrid.

La pandemia ha evidenciado un nuevo jugador en el mapa político, 'stakeholder' como se dice ahora en la formación ideológica conservadora, que ha entronizado definitivamente a Madrid en la parte alta del mapa. Supera a todos en renta per cápita, acumula inversiones, recupera glamour social y encandila a una derecha hasta ahora 'lost in translation'. Tomando ventaja de la política fiscal y sanitaria de aquella autonomía, que denostaba cuando la reclamaban otros, la utiliza ahora para hacer las cosas 'diferentes', y ha movido el tablero de las políticas públicas: desde la creencia ciega en la 'curva de Laffer' (bajar impuestos y subir la recaudación), hasta una supuesta sacralización de las libertades individuales por encima de lo que la izquierda interpreta como 'bien común'. Ha situado así de momento su economía en mejores tasas de crecimiento. Todo ello desde la irresponsabilidad fiscal de quien nunca se la juega de verdad, teniendo como tiene Madrid cubierta las espaldas por la capitalidad que financiamos entre todos.