Violencia de género

Stop machismo

Con mensajes de "stop feminazis" como los que rodearon a Rocío Carrasco, más que ofendernos, os definís a vosotros mismos

Rocío Carrasco acude al juicio por la demanda civil interpuesta por Antonio David Flores por impago de la pensión de sus hijos, el pasado 30 de abril. / José Ramón Hernando / Europa Press

Hace unos días, una foto de Rocío Carrasco se hizo viral. A su llegada a los juzgados era rodeada por la asociación Stop feminazis. Alguna prensa, sin pudor, les ha dado espacio y autoridad, incluso. Esta asociación machista puede acosar a mujeres víctimas sin mayores efectos. En enero, dos de sus miembros fueron absueltos por colgar pancartas machistas en los juzgados de violencia sobre la mujer de Madrid. En ellos se podían leer mensajes como "in dubio, pro zorra" o “llama y te desplumamos el pollo" (sobre el 016). Decía la Audiencia Provincial de Madrid que no es delito de odio, sino que podría suponer una falta de injurias, figura despenalizada en la reforma del Código Penal de 2015. Uno de los absueltos fue Francisco Zugasti, que antes ya fue detenido frente a la casa de Pablo Iglesias e Irene Montero por intento de agresión a un agente. También preside la asociación Projusticia. Leer su presentación solo evidencia lo poco que saben de derecho, y mucho menos, de ordenamientos internacionales.