Tablero catalán

Colau sin Twitter y Aragonès con Almax

  • La alcaldesa promovía los escraches y articuló una campaña en torno a la difamación de su contrincante, Xavier Trias

  • ¿JxCat va a renunciar a la posibilidad de hacer política en los municipios aprovechando el presupuesto de la Generalitat? Ni en sueños

Pere Aragonès. / Toni Albir

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, se ha despedido de Twitter indefinidamente porque aspira a hacer buena política y la red social del pajarito se ha convertido en la cueva de los eructos. En el testamento en el que explica su abdicación temporal, Colau explica que le agrada que le lleven la contraria porque la política es diálogo y debate. Pero que en Twitter ya predominan los perfiles anónimos que solo insultan e incitan al odio y las cuentas falsas automatizadas de la extrema derecha que impiden que la conversación política tenga un carácter constructivo. Todo lo que dice la alcaldesa, y mucho más, es verdad. A Colau solo le ha faltado poner deberes y recomendar como lectura obligatoria el libro AntiSocial, La Libertad de expresión en Internet de Andrew Marantz (Capitán Swing, 2021) que, aunque escrito para el público estadounidense, dibuja un panorámica exportable sobre cómo andan las cosas por la red de degradadas desde hace ya un buen tiempo.