Inteligencia artificial

Hacer tributar a los robots

Los gobiernos amenazan el empleo al reducir de forma continua la fiscalidad empresarial sobre las máquinas y subvencionar su compra

DAL-e, el robot humanoide de atención al cliente de Hyundai.

La inteligencia artificial va a destruir una cantidad ingente de empleos en los próximos años. No solo los de baja cualificación y salarios, sino empleos de “cuello blanco” de media o elevada cualificación cuyas tareas pueden ser realizadas ahora por robots inteligentes y algoritmos que toman decisiones (que antes hacían las personas). Las decisiones sobre concesión de créditos que dependían de los directores de oficinas bancarias ahora las hacen de forma más rápida y segura los algoritmos. Ocurre en otras profesiones, como diagnósticos médicos, sentencias judiciales o trámites o tareas que antes realizaban registradores y secretarios de ayuntamientos.