El tablero catalán

La ultraderecha catalana

La única extrema derecha con posibilidades de articulación política es Vox

Ignacio Garriga (Vox) justifica la moción de censura como un deber nacional

Tras las elecciones autonómicas de 2015, Artur Mas entregó las llaves del 'procés' a la extrema izquierda. El entonces diputado de la CUP, Benet Salellas, nada más coger el llavero con la mano, lo celebró humillándole sin reparo: le hemos enviado a la papelera de la historia. Tras el adiós forzado de Mas, la extrema izquierda siguió arreando en el costado más débil del soberanismo negándose a aprobar los primeros presupuestos de Carles Puigdemont redactados por Oriol Junqueras. Para engatusarlos el gerundense tuvo que sacarse de la manga una moción de confianza y prometer el referéndum que acabó celebrándose el 1-0 de 2017.