Hace casi 40 años me enamoré literalmente -ella tenía 41 y yo 16- de Montserrat Carulla viéndola representar 'La filla del mar', dirigida por Ricard Salvat, en el Poliorama de las Ramblas, ¡Cuánta belleza, elegancia y armonía desprendía su rostro, cuánta música brotaba de las palabras de Àngel Guimerà pasadas por sus labios! También aquel día descubrí que el catalán podía ser una muy noble lengua de verso en voz alta, como el italiano de Dante o el francés de Racine. Todo en Carulla era terriblemente humano, aunque caligráficamente pasado a limpio.
Peccata minuta
La señora Carulla
Montserrat Carulla, en el 2016 /
Temas
Lo más visto
- Adiós a otra tienda centenaria de Barcelona: "Cerraremos cuando agotemos las existencias"
- Los vecinos del bloque Venus perderán el realojo gratuito en La Mina si no renuncian a pedir indemnizaciones
- Las tres pruebas contra David, el hombre que cruzó Europa para matar a su mujer en Madrid
- En marcha un operativo policial contra una banda de estafadores en Barcelona y L'Hospitalet
- El Ayuntamiento de Barcelona pone fin a la feria de payés de Sant Antoni a petición de los 'paradistas' del mercado