Desde el Eixample

Los pisos de mi barrio

La Esquerra de l'Eixample se está llenando de balcones con carteles de 'se alquila'

Cartel de alquiler en un porta del Eixample derecho. / JORDI COTRINA

En mi barrio hay demasiados pisos en alquiler. Son pisos grandes, antiguos y caros. Me refiero a la parte antigua de mi barrio, activada a principios del siglo XX con la creación del Hospital Clínic y la Facultad de Medicina, y potenciada por el Mercado del Ninot, que data de 1935. En esos años treinta está el origen de muchos de los edificios de viviendas de la Antiga Esquerra de l'Eixample. Son pisos bonitos en su mayoría, modernistas, herederos de una época de especial sensibilidad artística. Algunas porterías gozan de la protección del patrimonio arquitectónico, imprescindible instrumento para proteger un legado insustituible, en tiempos de especulación máxima e ignorancia artística.