IDEAS

Yo, que he sido rey

Hasta seis veces he sido coronado en escena, por lo que debería ser capaz de entender o vislumbrar mínimamente lo que pasa por la cabeza de un rey en un determinado momento. Pero se me escapa

Graffiti satírico del artista J Warx en una calle de Valencia, en agosto del 2020, tras conocerse la marcha de Juan Carlos de España. / AFP / JOSE JORDAN

Este oficio mío de actor tiene grandes paradojas: o no te permite vivir -a veces, ni siquiera sobrevivir- o te lleva a vivir cientos de vidas tan contrarias y ajenas a la tuya propia que te tiene en perpetuo peligro de perder el norte, no hallarte en el sur y andar de continuo dando tumbos entre el este y el oeste. Es un oficio de riesgo, a merced de dos grandes loterías, la del talento y la de la fortuna. Hay quien juega y gana en las dos, hay quien con premios gordos en la primera apenas ve recompensa en la segunda, y hay quien se mueve cómodamente en la pedrea de ambas. Oficio inestable, dicho en claro.