Al contrataque

Lo real y lo absurdo

En la vida real más de 20.000 personas se han quedado sin trabajo porque cierra una fábrica de coches. En la vida virtual la discusión se centra en que los manifestantes que han perdido el trabajo se expresan en castellano

Trabajadores de Nissan protestan por el cierre de la planta de la Zona Franca, ante un concesionario de la marca en Granollers. / GETTY IMAGES / DAVID RAMOS

En la vida real las colas del hambre dan la vuelta a la manzana, tienes que llegar temprano si no quieres quedarte sin nada e irte a dormir con el estómago vacío. Los carteles que te dicen que tu ciudad es poderosa y los discursos que te cuentan que este es el mejor país posible tendrían que servirte de consuelo. En la vida virtual la discusión absurda de turno gira alrededor de una fotografía absurda que se ha hecho la alcaldesa en su cama.