Hoy hace 53 años que ‘Satisfaction’, la pieza mítica de los Rolling Stones, llegó al nº 1. Hace unos días, se cumplieron nueve años de que Cristiano Ronaldo fichaba por el Real Madrid en olor de multitudes, provocando la satisfacción de millones de seguidores que, hoy, se han enterado por carta de que CR7 ha pedido a Florentino Pérez, que le permita irse a la Juventus por poco más de los 93 millones que costó (112) y por 900 millones de euros menos de su clausula.
Se acabaron las comparaciones. Se acabó que las dos grandes estrellas mundiales compartan campeonato. Se acabó esperar el duelo CR7-Messi. Los grandes jugadores, dos, tres, a lo sumo cuatro, juegan donde quieren y se van cuando quieren. De momento, el único fiel, el único que siente los colores y sigue agradecido a todo lo que su club, el Barça, ha hecho por él, es Leo Messi, que solo se irá a Rosario a prejubilarse con su peña. Los demás, empezando por el folclórico Neymar Júnior y terminando por el determinante CR7, han besado la camiseta que más les ha apetecido.
El hombre con mayor ego del mundo
“Tienen envidia de mí, soy rico, guapo y gran futbolista”, dijo Cristiano. “Fue bonito jugar en el Madrid”, comentó para aguar la fiesta de las fiestas. “Estoy triste, la gente del club ya sabe por qué”, comentó cuando quería que le pagasen la multa de Hacienda. “Tu amor me hace fuerte, tu odio, implacable”, escribió en Instagram.
Si alguien se ha atrevido a tanto, ése ha sido Florentino Pérez, que, como gurú de los negocios, ha de tener ya preparado su siguiente galáctico aunque, de momento, la conquista de las conquistas, ese tres de tres histórico, solo le ha producido dolores de cabeza y pérdida de imagen, pues desde que CR7 le chafó el celebración, desde que Bale, su chico preferido, dijo que igual se iba, le ha dimitido Zinedine Zidane (sin enterarse), ha provocado el caos en España arrebatándole al seleccionador y ahora vende a su estrella, que se despide por carta.
Nadie se esperaba algo así del Madrid. No del ‘ser superior’, fijo. Lopetegui empieza con menos 50 goles.