HAY VIDA MÁS ALLÁ DE ESTE GRANDÍSIMO BARÇA

Aplausos a Valdés

Aplausos a Valdés_MEDIA_2 / JORDI COTRINA

Los ciclos de la vida pueden empujar a un sujeto a ocupar escenarios opuestos, trincheras intercambiables. El jefe de un comité de empresa llega a director general. El enfoque cambia radicalmente. El fútbol sirve de metáfora conVíctor ValdésyAndoni Zubizarreta,los dos mejores porteros de la historia del Barça. El flashbacknos sitúa 19 años atrás.

Domingo, 21 de mayo de 1994.Zubizarretaescucha en boca del vicepresidenteJoan Gaspart que no renovará por el Barça. La conversación tiene lugar en el autobús jardinera que traslada al equipo al avión con destino a Barcelona, al día siguiente del desastroso 0-4 de Atenas ante el Milan deCapello. Cruyffecha a Zubi del Barça tras ocho años de servicio, cuatro Ligas y la primera Copa de Europa, la de Wembley. «No me han dejado ni despedirme, quería acabar mi carrera aquí, la directiva me dio muchas esperanzas de seguir», declaró desolado.

Jueves, 17 de enero del 2013.Víctor Valdésanuncia, a través de sus representantes, que ha decidido no renovar contrato con el FC Barcelona y que en julio del 2014 estará en otro club, en otra ciudad, con otra gente. Casi nadie esperaba tanta sinceridad y, como toda la vida (en la salud y en la enfermedad), el barcelonismo se quedó como en un estado de congelamiento.

La suerte está echada entre feroces detractores del fugitivo, socios sensatos que no entienden que el club sea incapaz de seducirlo, defensores de la libertad de los trabajadores (aunque sean millonarios) y las sucesivas apariciones deVilanova, Iniesta, PuyolyCescpidiendo comprensión y respeto.

Al Zubi director deportivo le toca reforzar a la entidad y dar la cara con palabras que no dicen la verdad de lo que piensa. «Hay que respetar la decisión deVíctory respaldarle», expresó bien jodido por dentro. Hay que ser diplomático -y en ocasiones revisar aMaquiavelo- cuando se asume un alto cargo. ¿Qué hubiera dicho aquellos días de despido y desprecio a su gran palmarés?Valdés guarda silencio. Mañana, cuandoManel Vicpronuncie el habitual«amb el número u, Víctor Valdés»,el eco del Camp Nou indicará al meta si ha acertado al anunciar que se larga, que no negocia, que hay vida más allá de este Barça al que ha dado tanto.

Yo le aplaudiré largo rato.