El turno

El Eje de la Prosperidad de los corruptos

En el verano del 2004, cuandoPasqual Maragallacababa de plantear la idea de la Eurorregión mediterránea, se reunieron en Mallorca los presidentes de las comunidades valenciana, balear y madrileña para lanzar públicamente una contraofensiva que bautizaron como el Eje de la Prosperidad. La hemeroteca nos recuerda las razones de fondo de aquella iniciativa: en Valencia se trataba, como siempre, de ganar adeptos a base de denunciar las pretensiones imperialistas de los pancatalanistas del Norte; en las islas,anam i venim i mos feim amb tothom;y en Madrid, de atacar aZapateroacusándole de ser rehén deMaragall,que a su vez lo era deCarod,que a su vez había pactado con ETA, etcétera (¡da vergüenza recordar tanta infamia de hace solo ocho años!). Al final, la Eurorregión arrancó, incompleta, y contribuyó a remover lo que, en definitiva, ha acabado imponiéndose: la importancia estratégica e inaplazable del corredor mediterráneo.

El otro eje, el de la prosperidad, también triunfó. Funcionó la correa (en alemán, Gürtel), tirada porCorreay que propició gran prosperidad para un montón de chorizos de la comunidad de Madrid, de la de Valencia y, con una franquicia propia, de Mallorca. Así ha terminado el Eje de la Prosperidad: con gente de los tres gobiernos en el banquillo. En Madrid,Esperanza Aguirrecortó las cuerdas con una destreza de zorro, dejando caer a sus hombres, así que empezó el olor a podrido de las alcantarillas de casa; en Valencia,Francisco Campses juzgado por 10 trajes cuando debería serlo por haber hundido a su país en la bancarrota total; y en Mallorca,Jaume Matas,el conquistador, podría ir a la cárcel por haber mojado en todas las tazas, incluso en las del yerno real, que también mojaba. Esta ha sido, ocho años después, la gran lección del Eje de la Prosperidad de los corruptos.