"Todo lo que se puede considerar un obstáculo forma parte de mi arte". No es una aseveración de un nuevo arquitecto, ni de un artista contemporáneo, ni siquiera de un publicista posmoderno: es deDavid Bell,divulgador delparcoursen francés original yparkouren idioma joven. Se trata de una disciplina que consiste en salvar obstáculos del perfil urbano, solo con las posibilidades del cuerpo sin ninguna ayuda ajena: vallas, trenes, árboles, edificios, mobiliario urbano... Y todo lo susceptible de ser reseguido mediante saltos. Sus practicantes dicen huir de la competición, pretenden superar el miedo y persiguen la autosatisfacción. Y, como son jóvenes, quieren ser diferentes. La idea es poética, es imaginativa y da otra dimensión a la cultura urbana. Elparkourse extiende como una epidemia, pronto nos llegará y es posible que podamos dar al mundo una particular dimensión de esta práctica, como ha ocurrido con los grafiteros. Aunque, claro, cuesta imaginar a un joven saltando por las crestas de la Sagrada Família, la Torre Agbar, o... O mejor no dar ideas.
El billete // JOAN PERE Viladecans
'Parkour' urbano
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