Tras la pista de Alfredo: fotógrafo del 'boom' de los tablaos turísticos

'Foto Alfredo. Mensaje en una botella' es una exposición, pero también, como indica su título y como explicó el colega Rafael Tapounet en este diario, una petición de ayuda. La muestra, organizada por el forofo de la escena pop española de los años 60 Félix Martínez, en colaboración con el festival Purple Weekend, recoge en El Palacín de León, hasta el 11 de febrero, carteles de oscuros u oscurísimos grupos barceloneses de la época con el sello del estudio Foto Alfredo. El problema es que apenas cuenta nada de Alfredo porque apenas nada se sabe de Alfredo. De ahí el SOS informativo. Gabriel Mas tiene algunas cosas que aportar. Mas es el propietario del bar bodega La Belter, establecimiento bautizado en honor a la poderosa marca discográfica barcelonesa para la que en las décadas de 1960 y 1970 grabaron Dolores Vargas 'La Terremoto', su hermano El Príncipe Gitano, Argentina Coral, el matrimonio formado por Lola Flores y Antonio González 'El Pescaílla' (juntos y por separado), Maruja Garrido, Rumba Tres, El Peque Sevillano y un sinfín de artistas de ese magma paraflamenco que por convención solemos llamar rumba. Desconocidos Mas es coleccionista de fotografías y carteles de artistas de la órbita flamenca de los años 50, 60 y 70 y de las paredes de La Belter cuelga una fascinante panoplia de esas imágenes. Cuatro de los retratos expuestos llevan la firma del Foto Alfredo: uno del guitarrista Enrique Montoya, dos de otras tantas parejas artísticas desconocidas y uno, supuestamente, del propio Alfredo. Nos interesan las dos parejas artísticas desconocidas, al menos por Mas. Foto Alfredo estaba en el número 87 de la calle del Conde del Asalto, actualmente Nou de la Rambla (qué retroceso en el nomenclátor de Barcelona), casi enfrente de donde está La Belter. En el 103 de Conde del Asalto abrió en 1959 la Bodega del Toro, "uno de los primeros locales de España de verdadero arte español", según la hiperbólica publicidad de la sala fundada por la Bella Dorita y su pareja, Narciso Alberti. El tablao aguantó hasta principios de los 70 y Foto Alfredo hizo no pocos retratos promocionales de sus artistas. El espacio se transformó a mediados de la década en Bagdad, el Harén del Paralelo, aún abierto. Tú a Palamós, tú a Palma... Con el 'boom' turístico del desarrollismo proliferaron los espectáculos flamencos en tablaos, 'boîtes', salas de fiestas, hoteles, chiringuitos... Un entramado con el que Foto Alfredo se puso las botas, cuenta Mas. En las cercanías del estudio había empresas como Espectáculos Fantasio o Agencia del Doctor Canals, dedicadas a satisfacer la elevada demanda de artistas por parte de la industria flamenca de Barcelona, la costa catalana y las Islas Baleares. Y como un artista necesita fotos de presentación y Foto Alfredo estaba al lado y tenía vestuario y atrezo flamencos, allí que iban muchos antes de partir para Palamós o Palma. No se trataba de números uno, claro está, de modo que abundan en la producción de Foto Alfredo los artistas desconocidos, como esas dos parejas. El sello discográfico Belter apenas trabajó con Foto Alfredo, informa Gabriel Orfila, fundador de Divucsa, que adquirió el catálogo de Belter en los 80. "A finales de los 50 y principios de los 60 -prosigue- realizó algunos trabajos con artistas, casi siempre flamencos, que venían a alguna de las salas de fiestas de Barcelona. Nada más". Los fotógrafos con los que contaba Belter para sus portadas e imágenes promocionales eran el tándem Oriol Maspons y Julio Ubiña, Horacio Seguí, Andreu Basté, Julià Peiró, Carlos Ramspott o Lorenzo Fuentes, recuerda Orfila. Si alguien quiere atender a la petición de información de Félix Martínez, puede hacerlo escribiendo a la dirección espectaculos@elperiodico.com.

Tras la pista de Alfredo: fotógrafo del 'boom' de los tablaos turísticos

El propietario del bar bodega La Belter arroja un poco de luz sobre el estudio fotográfico del Raval que realizó carteles de arcanos grupos pop barceloneses de los 60, recogidos en una muestra en León

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