El embrujo de Ivo Pogorelich

Con un brillante ‘Segundo concierto’ de Chopin, el pianista croata inauguró en el Palau el curso de la Franz Schubert Filharmonia

Un instante de la velada con el pianista croata Ivo Pogorelich. / EPC

El pianista croata Ivo Pogorelich fue el invitado de honor del concierto inaugural de la nueva temporada de la Franz Schubert Filharmonia el domingo en el Palau de la Música Catalana, tras su paso por Vila-seca y Sant Cugat. El conjunto catalán propuso al reconocido artista una pieza fundamental en la historia del género para orquesta y solista, el ‘Concierto para piano Nº 2, Op. 21’ de Chopin, una obra maestra –en realidad, el primero que escribió el compositor polaco– que se transforma en manos del solista en un medio para expresar su manera de entender el Romanticismo. Y quién mejor que Pogorelich para hacerlo, ya que su trayectoria ha estado marcada por una particular visión del gran repertorio para teclado, consiguiendo esta vez una interpretación orgánica en la que brillaron los contrastes, las medias voces y la independencia de las líneas melódicas.