Festival de músicas avanzadas

Una odisea de dos meses para llegar a tiempo al Sónar desde Shanghái

  • La analista de tendencias Raquel Sánchez Montes ha debido superar un confinamiento de 45 días, un viaje de 1.500 kilómetros en tren y una cuarentena de 14 días para poder asistir a su ineludible cita anual con el festival desde 2004

Raquel Sánchez Montes, en un mercado de Guangzhou / RSM

“De verdad que voy a llorar cuando llegue al Sónar. Voy a llorar”. Raquel Sánchez Montes es analista de tendencias de moda en Shanghái, ciudad en la que vive desde noviembre pasado y a la que llegó después de seis años residiendo en Guangzhou. Fan sin desmayo del festival barcelonés, que visita religiosamente desde 2004, se le torció el gesto cuando, el 1 de abril, las autoridades chinas decretaron un confinamiento total indefinido de Shanghái a causa de una oleada descontrolada de ómicron. Hizo sus cálculos y empezó a sospechar que este año, quizá, no llegaría a tiempo a Barcelona. No estaba dispuesta, sin embargo, a bajar los brazos; llegaría al Sónar al precio que fuera.