Crítica de música

André Rieu, tres horas de felicidad en el Palau Sant Jordi

El violinista y director de orquesta holandés desplegó su frondoso y dinámico espectáculo con citas a valses, marchas y arias, y contó con Los del Río en el fin de fiesta a golpe de la ‘Macarena’, en una sala con las entradas agotadas

documentacion Fotos 1-140675587 - copia.jpg / JOSEP GARCIA

Virtuosas violinistas con vaporosos vestidos de Cenicienta, ‘tenores de platino’ otoñales e hinchando sus fracs como pavos reales, un carrusel de valses, marchas y arias de cuento de hadas, sonrisas sin segunda intención y mucha guasa con el público en tres horas de diálogo continuo. Y en el centro del cuadro, la figura y el violín del señor André Rieu, un tipo que sabe lo que hace: seguramente el mayor fenómeno con fondo clásico desde Los Tres Tenores, capaz de llenar un recinto como el Palau Sant Jordi, este sábado, pese a la (casi) indiferencia de la prensa.