La mascarilla del demonio (4)

Una historia paralela del cine

Jordi Sánchez-Navarro añade un nuevo capítulo a su cruzada en defensa de la animación con el libro 'La imaginación tangible'

La banda de los esqueletos de la película ’Mad Monster Party’ (Jules Bass, 1967).

El cine de animación no es cine. Si le dieran a Jordi Sánchez-Navarro un euro por cada vez que ha tenido que escuchar o leer esa frase no sería millonario (para eso tendrían que habérsela dicho 91 veces cada día en los últimos 30 años) pero seguramente se podría costear una cena en un buen restaurante cuando se levanten las restricciones. Sánchez-Navarro es un hombre que lo sabe casi todo sobre la cultura de la imagen y que comparte generosamente esos conocimientos en sus clases, libros, cursos, conferencias y hasta 'podcasts' (es uno de los responsables de 'Marea Nocturna', referencia imprescindible para los aficionados al cine fantástico y de terror). También es programador de Anima’t, la sección de animación del festival de Sitges, y un militante apasionado en la defensa del "arte de dibujar el movimiento", según la afortunada expresión del animador experimental Norman McLaren.