Que no pare la música

Cerdanyola retiene el blues

El Festival de Blues afronta su edición 29,5ª, a la espera de celebrar el 30º aniversario cuando el temporal amaine, con 29 conciertos en espacios inéditos al aire libre

Jose Guillem, Siscu Campos y Albert Puig, de izquierda a derecha, organizadores del Festival de Blues de Cerdanyola. / ÁLVARO MONGE

En Cerdanyola se observaba una afición por la música, si bien el blues era ahí un género más, en diálogo familiar con el rock’n’roll o el rock sureño. Pero las tradiciones, si no están, se incentivan, y desde que existe el Festival de Blues, la ciudad del Vallès es un punto caliente en la ruta de esta tradición sonora nacida en el delta del Misisipí. No es que la muestra, que el viernes abrirá su nueva edición, naciera porque la ciudadanía muriera de amor por el blues, sino que “es más bien al revés: desde su nacimiento ha activado la pasión por esta música en Cerdanyola, con un público atento, bandas que la cultivan y bares temáticos”.