Los coliseos afrontan las reaperturas

Nuevos tiempos para la lírica

Muchos teatros de ópera internacionales prefieren no abrir con un aforo reducido ante las pérdidas que conllevaría esta medida

El Staatstheater de Wiesbaden, en Alemania, fue el primero en ofrecer ópera después del cierre. / LUKAS GORLACH

La pandemia está redefiniendo la millonaria industria de la ópera a nivel internacional. Hace unas semanas, la diva Anna Netrebko –que en muchas ocasiones cobra un porcentaje de la taquilla por sus actuaciones– calificaba como «una estupidez» el hecho de que los teatros se vieran obligados a reabrir sus puertas con el aforo reducido a un tercio o a la mitad, sobre todo si se compara al público operístico, paciente y formado, con el de un concierto de rock o, incluso, con el interior de un vuelo comercial.