La segunda película de la francesa Jeanne Herry acompaña a un bebé y a toda una sucesión de brazos adultos por los que va pasando -de enfermeras, doctores, asistentes familiares, psiquiatras, padres potenciales- desde que nace hasta que finalmente encuentra un hogar adoptivo. Mientras oscila atrás y adelante en el tiempo, 'En buenas manos' resulta más efectiva cuando adopta maneras documentales para explorar asuntos legales y psicológicos relacionados con el sistema social francés que cuando abusa de subtramas innecesarias, momentos sensibleros y el tipo de planos de los que se nutren los anuncios de pañales.