La discriminación sexual había aparecido de manera residual en muchas películas de instituto, pero siempre revestida de elementos estigmatizantes y marginadores. Por eso resulta tan importante ‘Con amor, Simon’, porque el personaje homosexual ya no es el mejor amigo de la protagonista, sino que es dueño de su propio relato y, además, el descubrimiento de su homosexualidad no se convierte en un drama, sino en una auténtica celebración de la diferencia. ‘Con amor, Simon’ apuesta por la integración LGTBI dentro del ámbito 'mainstream' y se adentra con humor y sensibilidad en los conflictos de una generación que se esfuerza en apartar los tabús sociales y abrazar la tolerancia.