CRÍTICA DE CINE

'Los hambrientos': no es otra película de zombis más

El director canadiense Robin Aubert introduce cambios sugestivos en una fórmula familiar

Tráiler de ’Los hambrientos’ (2017) / periodico

Los hambrientos ★★★

Dirección:  Robin Aubert

Reparto:  Marc-André Grondin, Monia Chokri, Brigitte Poupart, Charlotte St-Martin, Micheline Lanctôt

Título original:   'Les affamés'

País:  Canadá

Duración:  100 minutos

Año:  2017

Género:  Terror

Estreno:  13 de abril del 2018

'Los hambrientos' es otra historia de zombis, y no precisamente original. Para ser precisos, es otra historia de 'infectados': un pequeño pueblo del Québec rural se ve asolado por una extraña plaga que convierte a sus víctimas en –por supuesto– depredadores de carne humana. Algunos y algunas, todos predeciblemente diferentes, han logrado sobrevivir a la amenaza. Pero la buena suerte no puede durar para siempre.

Esta premisa algo genérica puede llevar a asumir fácilmente que 'Los hambrientos' no aporta nada al subgénero. Pero pequeños detalles marcan la diferencia. Por ejemplo, el director y guionista Robin Aubert no pierde tiempo en explicar la plaga en la raíz del relato, sino que permite a las imágenes sugerir ideas. Puede que ver a los zombis correr no sea una novedad (no lo es desde 1980, año de 'La invasión de los zombies atómicos', de Umberto Lenzi), pero sí resulta curioso e inquietante que sufran dolor y que los sonidos que emiten al sentirlo sean, al menos en parte, reconociblemente humanos.

Y aunque la mayor parte del cine zombi pase en la oscuridad o cuanto menos la penumbra, Steeve Desrosiers (director de fotografía) filma casi siempre de día y con luz natural, creando un ambiente inusual para una historia así. Especialmente sugestiva a nivel visual es una parte final menos deudora de Romero que de Carpenter: esa capa de niebla que envuelve la acción como un manto fantasmal es un claro homenaje a 'La niebla'.