La feria de Bolonia es un encuentro editorial comercial, y solo lateralmente un acontecimiento cultural. Por eso uno se uede topar con actividades como la presentación de un estudio de mercado que intenta descifrar las claves y valores de la serie ‘Doraemon’ para hacer que el personaje triunfe en Italia. Ante los asistentes el investigador de la licenciataria, VIZ Media, descubre a los italianos que Doraemon tiene gran éxito en Asia (se ha olvidado de Catalunya), puede tenerlo en Italia si la serie de emite en mejores horarios y pasa a enumerar cuáles son sus valores tras trabajar con ‘focus groups’ de niños y madres (solo madres: esto es Italia).
Los niños valoran de Doraemon que ayuda, da ejemplo, siempre está presente y no se hace pesado porque sus inventos del bolsillo sin fondo son divertidos; pero le reprochan que sea demasiado paciente con Nobita. En resumen, alguien a quien no quieren emular pero que “querrían como amigo”. “Es una exaltación de la amabilidad”, concluyen los investigadores.
Los niños valoran la buena disposición de Doraemon, pero le reprochan que sea tan paciente con Nobita
“Las madres consideran a Doraemon un clásico intergeneracional”, añaden, y consideran que aborda temas como el 'bullying' de forma “no políticamente correcta, pero sin ser transgresiva”. ¿El problema, para vender camisetas, bolsas, zapatillas (que a eso vamos)? La estética feúcha. La solución, ‘merchandising’ de alta gama para los estilosos niños italianos. Que, presume el conferenciante, otro estudio demuestra que a los 5 años tienen un porcentaje de acierto a la hora de combinar colores de la ropa es del 90%, frente al 20% de los alemanes.