Carlota Subirós se acerca por primera vez a un clásico catalán con 'Maria Rosa', de Àngel Guimerà Àngel Guimerà(1845-1924), autor de obras como 'Terra baixa' y 'Mar i Cel'. El Teatre Nacional de Catalunya estrena con esta nueva producción, con una puesta en escena moderna y contemporánea, una serie de actividades entorno a la figura y la obra de Guimerà que incluye una exposición en el vestíbulo del teatro.

Mar del Hoyo (Mara Rosa) y Borja Espinosa (Marçal) protagonizan este melodrama, una historia de amor rodeada de bajas pasiones, asesinatos y venganzas, a partir del miércoles en la Sala Petita. Subirós ha trasladado a los protagonistas, representantes del mundo obrero de finales del siglo XIX, exponentes de la precariedad laboral y de las injusticias sociales, a nuestra época.

En su propuesta la carretera que están construyendo es pura metáfora. "No sitúo la acción en ningún pueblo concreto de Catalunya, ni en un entorno realista", afirma Subirós. Ese espacio neutro le permite retratar la polaridad de la obra jugando con contrastes: lleno y vacío, blanco y negro, material y abstracto. "Esta obra retrata un círculo de deseos primarios. Hay algo muy oscuro en la escritura de Guimerà que dispara contra el sistema moral de la época y contra las formas del drama romántico", añade la directora. "Cuando estrenas obra como 'Maria Rosa' hay una especie de reverberación personal, social y cultural compartida que me atrae".

Mar del Hoyo, protagonista elegida en un cásting, vive entre la ilusión y el miedo que impone representar un rol tan famoso. "He conectado con el personaje de forma muy intuitiva. No me ha costado entenderlo, he podido conectar con él a partir de mi parte más visceral y animal".

Cuando terminen las funciones a finales de febrero la compañía saldrá de gira por Catalunya.