Carmen Amaya, del Somorrostro al mundo

El 50º aniversario de la muerte de la bailaora inspira espectáculos, exposiciones, documentales y un libro

Carmen Amaya, en una visita a su barrio de Somorrostro. / POSTIUS

Carmen Amaya, el mito imprescindible. La catalana más universal murió hace 50 años enBegur, Girona. Y este aniversario, más que el delsupuesto centenariode sunacimiento(se ha confirmado que en realidad no nació en 1913) propicia quetablaos,compañías,festivalese instituciones se vuelquen en resarcir del olvido a esta transgresorabailaoraque también generará estrenos dedocumentales,exposicionesy hasta unlibro.

"Su baile era único y atemporal. Nadie bailó antes como ella y nadie lo ha logrado hasta ahora", aseguraMontse Madridejos, investigadora insaciable del flamenco y una las primeras en descubrir que su fecha de nacimiento no era "la que se escogió un poco por azar". "Las fotografías y películas de sus primeros años revelan que debió nacer en 1917 o 18, pero eso es lo de menos. Su legado y todo lo que significó es lo importante", asegura la que será una de las comisarias de unamuestraen torno aAmayaque reunirá también documentos inéditos, contratos de la época, etcétera.

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