crítica

'Machete', el tráiler era mejor

El tráiler era mejor Machete_MEDIA_1

Machetees la versión extendida de un tráiler. El director Robert Rodríguez ha tomado la narrativa original y la ha alargado 100 minutos, y los ha llenado con un relato descuidado -no hay ritmo, ni caracterizaciones- e innecesariamente complicado y una serie de mensajes bruscamente explícitos sobre el tema de la inmigración. Por eso, la película funciona a rachas. A ratos es desternillante, a ratos tediosa.

Rodríguez parece inseguro de si está haciendo una película de acción o una parodia-homenaje. Por un lado, durante los estilizados títulos de crédito y la brutal primera secuencia viste sus imágenes con disfraz de cine de serie B de los 70 -celuloide gastado o quemado-, pero luego abandona el truco. Por otro, las secuencias de acción no tardan en resultar rutinarias pese a que son infrecuentes, en tanto que salvo intrépidas excepciones se basan en una previsible sucesión de decapitaciones, empalamientos y desmembramientos rodados de forma caótica. E igual de confuso es el discurso político que convierte al héroe Machete en una versión bizarra de Pancho Villa. Demasiado a menudo, Rodríguez abandona sus aspiracionesexploitationpara repetir un vago discurso sobre el trato racista que los políticos y los guardas fronterizos estadounidenses infligen a los mexicanos.