MUNDIAL DE QATAR

Los marroquís de Barcelona lloran la eliminación de su selección

Unos pocos aficionados se juntan en las Ramblas tras el partido ante Francia para compartir la decepción del sueño arrebatado

Seguidores marroquís decepcionados en un restaurante del Raval de Barcelona al finalizar el partido / FERRAN NADEU

“No llores, lo que han hecho es historia”. En el Mundial en el que Marruecos ha convertido a las madres de los futbolistas en iconos de fuerza, heroicidad y bondad, es una progenitora la que intenta consolar a sus hijos ante el televisor. Han vivido las semifinales de la cita mundialista en un bar del Raval envueltos con la bandera de Marruecos. Y lo terminan igual, agarrados a ella e intentando olvidar que Theo Hernández, Mbappé y Muani les acaban de arrebatar el sueño. Ellos no lo entienden, porque se vieron con opciones durante el partido. Su madre, sí. Y es ella, la que intenta hacerles ver que lo rutinario no suele ser el éxito. Al menos no para ellos. Al menos no hasta ahora.