LA REAPARICIÓN DEL CAMPEÓN

Marc Márquez, de la sonrisa al emocionado llanto

  • El piloto de Cervera, que reconoce haber tenido la tentación de pelear por la clasificación, confiesa que el objetivo era terminar la carrera

  • Los médicos muestran su satisfacción por la manera y la inteligencia con la que MM93 supo manejarse en su regreso al Mundial

  • "Al principio tuve la sensación de que, como ocurre en el patio del cole, los grandes abusaron de mí", cuenta el campeón del Repsol Honda

  • Julià Márquez, que normalmente comparte entrenamientos y carreras entre los boxes de Marc y Àlex, se quedó este domingo junto al mayor

Marc Márquez (Honda) rompió a llorar de emoción al concluir, ayer, el GP de Portugal. / ALEJANDRO CERESUELA

Todo empezó cuando el miércoles los hermanos Marc y Álex Márquez se hacían la maleta para viajar a Portimao (Portugal) y, mientras sus dos perros, sus dos mascotas, Stich y Shira, pululaban por la casa, apareció su madre, Roser Alentà, y le pidió a Marc que no se fuese, que no la dejase sola “después de pasarnos los últimos nueve meses viendo las carreras juntos”.