FONDOS METROPOLITANOS

Presupuestos sociales

El presupuesto del área metropolitana para el 2019 contará con 751 millones de euros

Fachada de las oficinas del AMB. / AMB

El pasado 18 de diciembre, el Consejo Metropolitano aprobó los presupuestos del Grupo AMB para el 2019 con un total de 1.794 millones de euros. El Presupuesto General incluye el propio del AMB, que cuenta con 751 millones, y los fondos restantes, que se destinan al resto del Grupo AMB. Es decir, al Instituto Metropolitano del Taxi; el IMPSOL; y las sociedades de las que participa el AMB, como Transportes de Barcelona, Ferrocarril Metropolitano de Barcelona, AMB Información y Servicios, Proyectos y Servicios de Movilidad y Transportes Metropolitanos de Barcelona. 

LAS CARACTERÍSTICAS

En términos cuantitativos, el Presupuesto General del Grupo AMB es el tercero del sector público de Cataluña, por detrás de la Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona. «Y cumple con los objetivos de estabilidad presupuestaria, regla de gasto y límite de endeudamiento», explica el Gerente del AMB, Ramon Torra. Este fondo metropolitano permitirá consolidar un conjunto de políticas sociales, como el acceso a los servicios públicos de transporte y suministros básicos. También posibilitará mejorar la calidad de vida de los ciudadanos de la metrópolis y combatir las desigualdades sociales, que es una de las prioridades más importantes para el AMB. Asimismo, garantizará la gestión eficiente de la infraestructura verde metropolitana; y destinará el 0,7% de recursos propio en cooperación internacional y permitirá seguir en la mejora de la calidad democrática, a través de la Agencia de Transparencia Metropolitana.

LOS GASTOS

El gasto general de estructura supone el 7% del presupuesto del AMB. El resto de dotaciones, que representan el 93% del total, se evalúan por áreas o servicios. 

De mayor a menor gasto financiero se encuentran los Servicios de Movilidad y Transporte, con 323.523 M€; la Gestión de Residuos Urbanos, con 169,056 M€; la Gestión e Inversión en el Territorio, con 122,12 M€; y las dotaciones para el Ciclo Integral del Agua, con 63,89 M€. Finalmente, restan las políticas de Desarrollo Social y Económico, con una dotación de 12,63M€, las Relaciones Internacionales y la Cooperación, con 1,975 M€; la Planificación Estratégica, con 1,61 M €; los servicios Ambientales, con 1,48 M€;  y el Buen Gobierno y la Transparencia, cuyo presupuesto es de 579.000 €.

En cuanto a los Servicios de Movilidad y Transporte, los más importantes son los vinculados a mejorar la calidad del transporte público, así como la aportación a la Autoridad del Transporte Metropolitano (ATM), para contribuir a la financiación del conjunto del sistema metropolitano, con un crecimiento del 8,86% respecto a 2018. «Aquí también nos enfrentamos al reto de la extensión de la primera corona a los 18 municipios metropolitanos que formaban parte de la Zona 2», explica el Director Servicios Generales del AMB, Antoni Novel. 

Otro de los focos importantes donde se dirigirán más recursos es a la Gestión de Residuos Urbanos para el mantenimiento de las infraestructuras de tratamiento; la red de puntos limpios municipales; y línea de subvenciones a los municipios para llevar a cabo proyectos de nuevos sistemas de recogida, entre otras políticas. Esta inversión del presupuesto se justifica porque ha habido un crecimiento de la producción de residuos en los últimos años, «con lo cual el gasto de tratamiento crece, y también crecen los gastos asociados a la mejora o a la eficiencia del tratamiento de residuos en origen», comenta Novel. 

Finalmente, destaca el presupuesto para la Gestión e Inversión en el Territorio, que contempla la planificación urbanística y el desarrollo territorial, el espacio público y los equipamientos y las mejoras en los barrios. La dotación más significativa está destinada al cumplimiento del Plan de Inversiones aprobado por mandato; el mantenimiento de playas, parques y espacios fluviales metropolitanos; y la conservación de las Rondas. No obstante, en esta área destacan las políticas metropolitanas de vivienda, un tema central del mandato. Aquí se encuentra una importante dotación presupuestaria para la consolidación del nuevo operador metropolitano de vivienda social, Habitatge Metròpolis Barcelona, y la transferencia corriente al IMPSOL. «Actualmente tenemos la promoción de 1.000 nuevas viviendas asequibles con el IMPSOL, cosa que requiere una aportación extraordinaria vía presupuesto», afirma Torra. Y la otra aportación con recursos económicos y suelo es para el nuevo operador metropolitano de vivienda de alquiler. «Un ente público-privado que podría llegar a construir 4.500 viviendas», concluye el Gerente del Área Metropolitana de Barcelona.

¿De dónde viene el aumento en el presupuesto?

El presupuesto para 2019 ha experimentado un crecimiento del 9,7% en relación al aprobado para 2018. Este aumento se ha producido por la dotación de recursos para llevar a cabo la integración tarifaria de los 18 municipios metropolitanos de la segunda corona a la Zona 1; el incremento de las dotaciones destinadas a la financiación indirecta del Sistema de Transporte Público y el incremento de la aportación de la ATM a la financiación del transporte público de viajeros. Los ingresos del crecimiento de la Tasa Metropolitana de Tratamiento de Residuos, debido la subida del IPC y al aumento del canon de deposición e incineración de residuos que aprobó el Parlament. La dotación de recursos para completar la ejecución del Plan de Inversiones Metropolitano aprobado por mandato. Y la dotación para asumir situaciones de vulnerabilidad energética a través del Plan Metropolitano de apoyo a las políticas sociales municipales.