Europa a más de 40 grados: el calor extremo se ceba con los países del Mediterráneo

Una oleada de calor extremo ha invadido todo el hemisferio norte del planeta: desde China (donde el pasado lunes se llegaron a registrar 52,2 ºC) hasta Estados Unidos (donde los termómetros del Valle de la Muerte alcanzaron los 53,3 ºC) y Europa (donde se han superado los 40 ºC en buena parte del territorio e incluso se han superado varios récords de temperatura). Según constatan los 'mapas de calor' del globo, las temperaturas extremas se está ensañando con especial violencia en los países del Mediterráneo y, tal y como vaticinaban los expertos, los han convertido en un verdadero epicentro del calentamiento global. Solo hace falta echar un vistazo al mapamundi para ver cómo los territorios mediterráneos destacan entre los más afectados por el calor extremo de estos días. En estos momentos, de hecho, en España, Francia, Italia y Grecia se están registrando extremos de temperaturas tan elevados como en algunas zonas del norte de África y la península arábiga. En el nordeste de la Península Ibérica (desde Catalunya hasta Aragón y Navarra), así como en el sur de Francia y prácticamente toda la península itálica también se registran algunas de las anomalías de temperatura más altas del globo. Es decir, algunas de las diferencias más grandes entre los valores normales para esta época del año y los registrados en la actualidad. Este último aumento de los termómetros europeos es un síntoma de llegada de 'Cerberus', la tercera ola de calor del verano en Europa. En España, según explican desde la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), este episodio de temperaturas extremas ha provocado máximas por encima de los 45 grados en decenas de municipios tanto en la Península como en los archipiélagos. Los registros estatales apuntan a que en Figueres se han alcanzado los 45,3 ºC y en el municipio catalán de Porqueres se han superado los 44,3 ºC. También se han registrado cifras por encima de los 41 en provincia de Granada, Baleares, Zaragoza, Huesca y Teruel. Según datos del Servei Metereològic de Catalunya, este martes se han registrado 45,1 tanto en las estaciones del pantano de Darnius-Boadella como en Navata. También se estima que se han registrado máximas por encima de los 40 grados en más de 80 municipios. El azote de 'Cerberus' El calor infernal de esta semana también ha dejado una estampa similar en otros países del Mediterráneo. En Francia, por ejemplo, se han superado los 42 ºC en Córcega y se han registrado algunos de los valores más altos de la serie en varias regiones del sur. En Italia, se han alcanzado valores cercanos a los 44 ºC en varias localidades, sobre todo en Cerdeña y Sicilia, y se ha superado récord de temperaturas en más de 20 ciudades. Y en Grecia, los termómetros se han disparado cerca de los 48 ºC, han obligado a cerrar la Acrópolis y han avivado aún más los incendios que ahora mismo afectan el territorio. La Organización Meteorológica Mundial, por su parte, advierte que este miércoles se podrían registrar nuevos picos de calor extremo en todos los países del Mediterráneo. Se esperan máximas por encima de los 35 en varios territorios europeos y registros "muy por encima de los 40 grados" en países como España e Italia. Según calculan esta oficina de Naciones Unidas, los valores registrados a lo largo de esta semana están casi cinco grados por encima respecto a la media de las últimas décadas. En algunos puntos, los termómetros incluso han marcado temperaturas casi 10 grados más de lo normal para esta época del año. Los registros de estos días coinciden de lleno con la previsión que lanzó el último informe del Panel Intergubernamental de Expertos sobre Cambio Climático (IPCC). En este estudio, el más grande y exhaustivo realizado hasta la fecha, ya se advertía que el calentamiento global avanza el doble de rápido en los países del Mediterráneo y que "países como España destacan desde ya como uno de los puntos rojos del cambio climático". En este sentido, la comunidad científica también alerta de que el avance de la crisis climática no solo está elavando los termómetros en la región sino que, además, está convirtiendo el calor extremo en un fenómeno cada vez más intenso y frecuente.

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