Los Mossos d'Esquadra detuvieron el 26 de marzo en Mataró a un hombre de 36 años que custodiaba un local con 1.285 plantas de marihuana, acusado de un delito contra la salud pública por tráfico de drogas.
Una llamada al 112 alrededor de las 04:00 h informó que cuatro chicos estaban forzando la puerta de un local de grandes dimensiones para entrar a robar, pero cuando los agentes llegaron solo encontraron la persiana forzada y un gato hidráulico.
La nave, ubicada en un local en los bajos de un edificio de viviendas del barrio de Rocafonda, tenía una infraestructura eléctrica de gran calidad conectada de manera fraudulenta. La acometida eléctrica estaba manipulada para que ni se registrara ni se facturara la energía consumida para alimentar las plantas.
Al entrar, encontraron las plantas y al hombre, que acabó detenido. El 28 de marzo pasó a disposición del juzgado de instrucción en funciones de guardia de Mataró, que decretó libertad con cargos.
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