Podem Mataró vive actualmente en un “momento complicado en el que no se avanza desde hace una semanas”. Así lo ha admitido Montse Morón, Secretaria General de Podem Mataró, en un comunicado en el que asegura que “hay diferentes cartas de dimisión encima de la mesa”, aunque no especifica los nombres.
En declaraciones a la edición local de Mataró de EL PERIÓDICO, Morón ha explicado que ella misma propuso dejar la Secretaría General a partir de febrero de 2016 debido a una “sobrecarga de trabajo”.
“Tenemos que reestructurarnos. Podemos es un partido joven, que ha crecido mucho en poco tiempo y que necesita reorganizarse”, afirma Morón. Una reestructuración que se llevaría a cabo a principios de 2016, una vez pasadas las elecciones generales.
A pesar de esta argumentación, Morón confiesa que existe un “pequeño conflicto interno” y que algunas personas han aprovechado su propuesta para presionar y lograr que su dimisión sea efectiva cuanto antes.
UN LIDERAZGO CENTRALIZADO
Los problemas en Podem Mataró empezaron con la dimisión de Anna Caballero, que abandonó el grupo municipal VoleMataró y pasó a ser no adscrita a pesar de que Morón (también concejal del Ayuntamiento de Mataró junto a Sarai Martínez) le reclamara la devolución del acta de concejal.
A esto se le suma la posible dimisión de seis miembros del Consejo Ciudadano de Mataró (que formaban 11 personas) de las que, por el momento, sólo se ha formalizado la de Anna Jiménez.
Según fuentes del partido, el origen de estas dimisiones debe buscarse en el liderazgo ejercido por Morón que describen como centralizado, personalizado y poco transparente.
Tanto es así que los militantes de base se están movilizando y recogiendo firmar para exigir una asamblea que les permita conocer qué está pasando realmente en el partido y pedir responsabilidades a Montse Morón ahora, y no a partir de febrero de 2016.