La familia siempre en mente

Barcelona acoge el primer congreso internacional sobre intervención socioeducativa con familias

Actividades extraescolares en un casal. / FUNDACIÓ PERE TARRÉS

Como primer ámbito de socialización para una criatura, el núcleo familiar es clave en el desarrollo de su bienestar. Para intercambiar acciones de intervención directa o indirecta con las familias con niños en situación de más vulnerabilidad a través de las actividades socioeducativas, la Fundació Pere Tarrés organizó en abril el primer congreso internacional sobre intervención socioeducativa con familias e infancia en situación de vulnerabilidad. Unas 300 personas vinculadas al mundo de la infancia y las acciones socioeducativas, extraescolares o programas de acompañamiento a familias con más riesgo de exclusión social se dieron cita en el CaixaFòrum de Barcelona para debatir sobre temas como las violencias que tienen a la infancia como víctima, la salud física y mental y su afectación en todo el entorno familiar o los procesos migratorios.

Según datos del censo en Catalunya, el 87,7% de las personas vive en familia, que sigue siendo el primer estadio de aprendizaje de una criatura, a nivel individual y social.

En su presentación, el responsable del Programa CaixaProInfància de la Fundació Obra Social la Caixa, David Velasco, apuntó que “el mejor mecanismo para salir de la pobreza y la exclusión social es invertir en educación y en el trabajo con las familias”.

Labor conjunta

La especialista en dinamización comunitaria Txus Morata considera “un reto atraer a todas las familias a participar y a corresponsabilizarse de la tarea educativa de los hijos”. Según Morata, “sí que hay casos en los que supone un esfuerzo y una obligación reclamar esa participación a las familias, y en los casos más complejos, solamente la experiencia que sus hijos viven en los centros de 'esplai' ya se erige como un puente de aproximación a esos núcleos familiares”.

De este modo, y tal como fueron evidenciando los diferentes ponentes del congreso, las actividades socioeducativas en horario extraescolar, en 'casals', 'esplais' y colonias son clave en la mejora también para el conjunto familiar. “A partir de pequeños encuentros informales, actividades compartidas y entrevistas informativas se facilita la aproximación familiar al centro. Y también cumple esa función la accesibilidad de los educadores, mostrándose receptivos a la hora de resolver dudas de los padres y siendo flexibles atendiendo a la diversidad cultural, haciéndolos sentir parte importante en el proceso educativo, entregándoles pequeñas tareas y contando con ellos en todo momento”, explica la profesora Txus Morata.

Según informa AROPE, el indicador del estado y riesgo de pobreza y exclusión social en España, “durante el 2017, el 31,3% de los menores de 18 años se encontraban en riesgo de pobreza o exclusión social, un punto sobre la media de países de la Unión Europea”. Entidades y organizaciones sociales alertan de una cronificación de la pobreza en ciertos sectores sociales.