La sandía es una fruta de verano con muchas propiedades hidratantes. Su aporte calórico es muy bajo (por cada 100 gramos contiene solamente 30 calorías), está libre de grasa y colesterol, en cambio es rica en minerales como el potasio y el magnesio.
Aunque tenga efectos diuréticos y depurativos por su gran cantidad de agua, la sandía posee múltiples propiedades beneficiosas para el organismo. Su alto contenido en vitaminas A, C, E, D, niacina, tiamina, B6, B12, ácido pantoténico y antioxidantes, ayudan a conservar la piel en buen estado y tener un cabello brillante, así como proteger de los rayos solares permitiendo lucir un bronceado seguro, bonito y duradero.