Una receta casera para lograr un vientre plano consiste en exprimir el zumo de tres limones y añadir dos cucharadas soperas de aceite de oliva. Se mezcla bien, se aplica sobre la zona abdominal y se masajea el abdomen durante un mínimo de 15 minutos.
Lo más aconsejable es hacerlo tres veces por semana y por la mañana, antes de desayunar. Pero nunca se debe realizar después de las comidas o las cenas.
Para evitar la tripa hinchada también es muy importante controlar la dieta, no ingerir bebidas gaseosas y hacer algo de ejercicio físico.